La inevitabilidad de los edificios

Mañana voy a hacer algo que nunca pensaba que iba a hacer. Me dará la bienvenida a un equipo de trabajo y juntos vamos a renovar los edificios de la iglesia, sobre todo la casa pastoral. Dos días de trabajo intensivo ellos dicen, yo sinceramente no tengo ningún idea, nunca trabajé en construcción.

Mi formación en el ministerio sucedió en la ciudad. Siempre hemos estado en situaciones de ministerio que se centraron en las relaciones, los edificios estaban siempre alquiladas y funcional. En esta ambiente la construcción de casas, gastando dinero y energía mantener los edificios de la iglesia nunca ha estado en la agenda. En realidad no era una opción atractiva de hacer y no apareció en la lista de seminarios en los conferencias de fundación de iglesias tampoco. De hecho, uno podría argumentar que algunos nuevos movimientos obtienen su energía de ser crítico de estas cosas, es su punto de referencia de una manera negativa. Un poco de una alergia en realidad. Ahí es donde yo vengo. 

Y ahora, a través de una serie de eventos no planificados estoy pastoreando en un pueblo rural con algunos edificios de la iglesia modelo clásico. Irónico y probablemente Dios.

 

Como estamos descubriendo estos edificios, y través de ese lo que pasó antes de que venimos, me acordé de una experiencia hace algunos años. Nuestra familia visitaba un monasterio en ruinas al sur de Suecia. Lindo ruinas y una historia muy interesante. El monasterio fue construido en medio de un gran bosque, y tenía por objeto difundir tanto el evangelio como la civilización. Las técnicas modernas de agricultura de esta epoca, educación, comercio etc A través de su trabajo el monasterio ganaba influencia en muchas esferas de la sociedad.

Caminando por allí la idea vino a mí: los movimientos espirituales parecen dejar restos físicos que permanecen mucho tiempo después de su fuerza espiritual se ha desvanecido. Como estas ruinas. O escuelas. Hospitales. Los orfanatos. Edificios de iglesias. De hecho en el mundo occidental, es difícil pensar en un movimiento espiritual significativo que no ha dejado una marca en esta manera. Parece que necesitaban una infraestructura para canalizar toda esa energía y entusiasmo.

 

Luego, por supuesto, sabemos los siguientes pasos: la energía se va, el modo de mantenimiento se activa y el cuidado de las estructuras se convierte en una prioridad. En nuestro caso: la iglesia estaba a punto de cerrar, casi tenía ninguna actividad, pero todavía se limpiaban el templo cada semana, con orgullo. Es fácil ser crítico de esta paso, y con ganas de cortar todas las organizaciones y las estructuras para evitar llegar hasta allí. Pero esto no parece que sea posible. Por ejemplo: El movimiento de iglesias caseras, "House church" en la década de los 1980 pronto se organizaron cuando la necesidad de la formación y la estructura surgió. Movimientos de avivamiento producía denominaciones que pronto construyó edificios. El ciclo parece ser inevitable y natural. Entonces no hay necesidad de la alergia :-)

Dudo que voy a pensar en esta a la mañana cuando cambiamos el techo en 35 grados de calor. Pero parece que en la programa educativa de Dios, siempre hay nueva perspectivas de aprender.